Chilenos insisten con “plan general de utilización” para los ríos Puelo y Manso


La cuenca tiene un 65 % dentro de la Comarca Andina y la posible construcción de una represa hidroeléctrica cerca de Llanada Grande sigue preocupando a la zona, más allá de las “desmentidas” del mega proyecto de Endesa.


Un informe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile niega otra vez a la Cancillería argentina que haya avances sobre “eventuales proyectos de construcción de centrales hidroeléctricas en los ríos Puelo y Manso”.
La respuesta surgió a partir de un reclamo de la Embajada Argentina “por noticias que dan cuenta de que la empresa Endesa estaría proyectando una represa hidroeléctrica en ambas cuencas, aun cuando se encuentren en su etapa inicial o de estudios preliminares”.
En el mismo sentido, y por tratarse de cuencas binacionales, a través de la Dirección Nacional de Fronteras y Límites del Estado, se aclaró que “no existen nuevos antecedentes a los que fueron proporcionados por la delegación chilena en ocasión de la décima reunión del grupo de trabajo sobre recursos hídricos compartidos, celebrada en Santiago en julio de 2008”.
En coincidencia, funcionarios trasandinos descartaron que “se hayan presentado a la Superintendencia de Electricidad y Combustible solicitudes de concesión provisional para proyectos de centrales hidroeléctricas, que tienen por objeto permitir el estudio y aprovechamiento de un recurso hídrico determinado”.
Cabe recordar que el año pasado –por nota oficial-, el organismo chileno adelantó “una próxima reunión binacional, que podría ser la oportunidad para iniciar el proceso conducente a la elaboración de un plan general de utilización para los ríos Puelo y Manso, los que han sido priorizados por ambos países”, cosa que nunca se concretó.

Nuestro

Administrativamente, la cuenca se ubica al sudoeste de la provincia de Río Negro y al noroeste de la provincia de Chubut, departamentos de Bariloche y Cushamen respectivamente. En el sector chileno, toma la comuna de Cochamo, en la Región de los Lagos. Tiene una superficie aproximada de 880.000 hectáreas, de las cuales el 65,9 % (580.000 hectáreas) son de jurisdicción Argentina y el restante 34,1 %, se ubica en Chile.
Cabe recordar que en noviembre de 2007, Endesa Chile confirmó en la localidad cordillerana de Llanada Grande, que la empresa pensaba avanzar con el estudio de impacto ambiental para construir la represa hidroeléctrica Puelo, que inundaría 3400 hectáreas desde el paraje El Portón hacia Segundo Corral, con una potencia de generación de 320 MW. Al efecto, estaba planificado un dique de contención de las aguas de 90 metros de altura y con una central que sería incrustada en un cerro aledaño en un túnel de 110 metros de largo.
Allí, ante un auditorio de 150 vecinos, se dio un detallado informe sobre otra central eléctrica que se haría sobre el cauce del río Manso, denominada Steffen, donde se pensaban inundar otras 60 hectáreas.
Según anticiparon los técnicos y funcionarios de la multinacional, durante el 2013 se debe concretar el proceso de licitación y se estima que “la construcción llevará entre cinco y seis años, por cuanto se calcula que hacia el 2019 la planta entrará en servicio para abastecer el 5 por ciento del sistema interconectado nacional”.

Valiosa olla

Por otro lado, desde la ambientalista “Geoaustral” reiteraron que “lenta e inexorablemente avanza el proceso de destrucción de la cuenca de los río Puelo y Manso”, y que “el 2009 será sindicado como el año en que se dio inicio a las operaciones que confirman lo que durante años se ha estado especulando, y es el uso de las aguas binacionales por corporaciones energéticas que tienen derechos mercantiles, concedidos por el gobierno chileno, desconociendo el Protocolo Especifico sobre Recursos Hídricos Compartidos, firmado por ambos países”.
En concreto, acusaron directamente a “Endesa (corporación energética italiana), y el más reciente remate de todo el caudal del río Manso a una empresa chilena llamada Mediterráneo S.A., que han marcado un constante proceso de intenciones de usar esta agua para uso energético privado, sin respetar los tratados binacionales, las declaratorias de reserva mundial de la biosfera o considerar el efecto sobre las poblaciones que dependen de las economías agro turísticas y que son parte integral de esta valiosa olla hidrográfica”.