El consultor Ricardo Vignoni destacó que con el hecho de haber sido ternado como “Mejor Encuestador del Año”, junto con Roy Campos destacado consultor mexicano y Paul Valdez de la misma nacionalidad, por Premio Reed Latino, de mucho prestigio, “ya gané”. Indicó que eso lo prestigia y le abre ofertas incluso de nivel internacional.
No obstante reconoció que quedó afectado económicamente por la última campaña, donde trabajó para la Alianza Concertación para el Desarrollo, ya que le deben una importante suma que seguramente deberá cobrar a través de los estrados judiciales. Sobre la tarea del encuestador, dijo que “es difícil marcar a un político lo que está mal, la falencia, porque no le gusta en general que le digan la verdad”. Respecto a los comicios del 2013 en la provincia, consideró que “va a ser complejo” ya que “el electorado se siente defraudado de un lado y del otro, con los que se fueron y con los que vinieron”. “Hay un escenario muy partido para la UCR y muy partido también para el PJ; hay un descenso generalizado en cuanto imagen e intención de voto”, consignó a la agencia APP.
Vignoni señaló que el Premio Reed Latino “es uno de los más importantes por los jueces que actúan”, así como por “la cantidad de participantes, unos 550”, con consultores ‘de primera división’, entre ellos el que hizo la campaña al presidente norteamericano Barack Obama.
Indicó que con el hecho de ser ternado como “Mejor Encuestador del Año”, junto con Roy Campos destacado consultor mexicano y Paul Valdez de la misma nacionalidad, “ya gané”, más allá que después no resultó ganador.
Informó que sus trabajos considerados correspondieron al sondeo de opinión registrado en las elecciones a gobernador de Neuquén 2011 en donde fue reelecto Jorge Sapag, donde Vignoni marcó una notable precisión el resultado, y las elecciones a intendente en Cinco Saltos, donde también vaticinó el resultado con absoluta certeza.
Indicó a la agencia APP que se valoró en el primer caso que había muchos indecisos entre las opciones de Sapag y Martín Farizano, que rondaba el 22%, y que para ajustar el sondeo utilizó la metodología de “sacar las urnas a la calle, es decir, confeccionamos las boletas de cada uno y permitimos que un sector representativo se expresara en forma secreta, con promotores que recorrieron los domicilios, es decir, un simulacro de los comicios”. “La verdad que nos fue muy bien, logramos bajar la cantidad de indecisos al 7%”, afirmó.
En cuanto a la de Cinco Saltos, utilizó una metodología de medir “por semana”. Indicó que “el por qué” de las encuestas exitosas es lo que valoró el jurado.
Al consultársele desde cuándo se dedicó como consultor a hacer encuestas, informó que “desde la época de Horacio Massaccesi”, cunado competió electoralmente contra Víctor Sodero Nievas.
Dijo a la agencia APP que la mejor etapa personal como encuestador fue con el exgobernador Pablo Verani, “ya que me sentí valorado y acerté en todas las encuestas, realmente todas”.
Sobre la tarea del encuestador, dijo que “es difícil marcar a un político lo que está mal, la falencia, porque no le gusta en general que le digan la verdad”, mencionando que al exgobernador Miguel Saiz “no le gustaba” que le marcara lo que estaba mal o lo que había que corregir y por eso trabajó con él sólo dos años.
Dijo que como consultor y en función de un objetivo electoral tiene que medir la ‘sensación’ de los electores con certeza y en función de eso marcar estrategias que permitan llegar a ese objetivo, en función de fortalezas y debilidades.
Explicó que, por experiencia, 30 días antes la elección ya está definida, ejemplificando que entre César Barbeito y Carlos Soria un mes antes tenía 11 puntos de diferencia a favor del roquense, que es como terminó, no los 15 que se dijeron a poco de terminar el comicio que no fue cierto, el recuento marcó lo que había anticipado.
Indicó a la agencia APP que “hay políticos que les gusta que el encuestador le diga lo que quiere escuchar” y que él no trabaja así porque de esa manera el autor de la encuesta va a quedar desprestigiado, se pierde la credibilidad, por eso rechazó algunas ofertas. “Yo no voy a decir otra cosa distinta a lo que marca la encuesta”, explicó.
Explicó con respecto a la campaña que llevó adelante en los últimos comicios con la Alianza Concertación para el Desarrollo que le adeudan una cifra importante (cercana al millón de pesos) “que me ha deteriorado económicamente”, subrayando que “me siento estafado y defraudado”. Informó que no ha habido “interlocutor válido” para que le paguen esa deuda y que, por eso, “estamos armando todo para ir a lo estrados judiciales para que me reconozcan lo que he hecho”.
Indicó a la agencia APP que después de esta situación “cuesta repercusión” pero la nominación que obtuvo le da ánimo para continuar, “y ya me han llamado de dos o tres lados y tengo una oferta internacional también”.
Respecto a los comicios del 2013 en la provincia, consideró que “va a ser complejo, porque veo que hay una desazón del electorado hacia la clase política en general; el electorado se siente defraudado de un lado y del otro, con los que se fueron y con los que vinieron”. “Hay un escenario muy partido para la UCR y muy partido también para el PJ; hay un descenso generalizado en cuanto imagen e intención de voto”, adelantó. (APP)
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