Un grupo de familiares de los siete policías procesados y detenidos por la causa de la desaparición y presunto asesinato del joven Daniel Solano en el Valle Medio acamparon hoy frente a la Casa de Gobierno. Piden la intervención del gobernador Alberto Weretilneck para que liberen a esos imputados. El grupo está integrado por uno de los policías procesados en el caso, Ceferino Muñoz, quien señaló que piden al mandatario “que intervenga y acelere lo más que pueda las resoluciones, porque sabemos que como no hay elementos tienen que ser liberados”.
Muñoz señaló en declaraciones a Radio Nacional, consignadas por la agencia APP, que “nosotros venimos a instalarnos acá por un pedido de justicia; pedimos la libertad de mis compañeros, ya que no hay ningún elemento para que estén detenidos, no hay ninguna prueba contundente”.
Agregó que están en conocimiento que ya se encuentra en el Superior Tribunal de Justicia (STJ) la decisión de si corresponde o no que sigan detenidos los siete policías, pero “como ya han pasado ocho meses que mis compañeros están detenidos y no hemos tenido ninguna respuesta positiva, más allá de que no haya ninguna prueba contundente en contra de ellos, venimos a hacer el reclamo porque siempre es la misma situación, siempre siguen especulando con que pueden llegar a encontrar algo que los inculpe a ellos”.
Al consultársele si el reclamo es al gobernador Alberto Weretilneck, dijo que “sí, por una cuestión que él tomó intervención cuando la causa recién empezó ; así como en un momento intervino para que mis compañeros sean detenidos, pedimos que intervenga y acelere lo más que pueda las resoluciones, porque sabemos que como no hay elementos tienen que ser liberados”.
Reconoció que “soy cabo de la policía” y al preguntársele si por este reclamo público puede ser sancionado, respondió que “realmente es probable que tenga alguna sanción, pero la verdad es lo que menos me preocupa, lo importante son las familias que están sufriendo y si tengo que sufrir alguna sanción la sufriré y me atendré a las consecuencias”.
Clarificó además que no está en funciones sino que “estoy afectado desde hace un año y monedas; estoy procesado en la causa” por la desaparición y presunta muerte del joven Daniel Solano.
Indicó que “es ilegal lo que están haciendo conmigo y como nadie nos defiende, nadie nos ampara, hacen lo que quieren con nosotros y por ahí es una buena oportunidad para sacar esto a la luz de que hay muchas cosas por las cuales nos atropellan a los policías y nadie nos defiende”.
Explicó además que “en la causa en sí no aparezco en ningún momento, todavía no sé por qué me procesaron, porque mi nombre no aparece en ningún momento en la causa, pero fueron decisiones tomadas apresuradas, con mucha presión, y los resultados los vemos hoy”.
Informó que él estaba trabajando por adicionales en el boliche donde se lo vio por última vez a Solano y contó en este sentido que “el muchacho se puso un poco denso con las mujeres de adentro del local, no ocasionó disturbios, no hubo peleas, no hubo nada, solamente que este muchacho se puso pesado con las mujeres, así que la voz del local pide si lo podemos retirar del local, como todos saben la mayoría de los locales bailables se reservan el derecho de admisión y permanencia, así que le pedimos que se retirara, lo acompañamos hasta afuera, le preguntamos si tenía plata para el taxi, dónde vivía, si tenía que trabajar al otro día, contestó todo como corresponde, así que le dijimos que se fuera a su casa a dormir”. “Después no supimos más nada de él”, enfatizó.
Indicó que los tres policías que estaban haciendo los adicionales retornaron al interior del boliche porque ese era su trabajo y, además, “hay cuatro de los chicos que están detenidos que ni siquiera estaban trabajando esa noche, no estaban de servicio ni de adicional, estaban en su casa durmiendo, y hoy están detenidos porque alguien dijo que ellos estaban de adicional, que le habían pegado (a Solano), toda una película bastante importante, y el juez decidió creer eso”.
Aseveró que los siete policías detenidos “por la presión social y política” son inocentes.
Dijo que hay testigos que hacen otro relato diferente al que tomó el juez, ya que “hay un compañero que viajó con él, hay quien vio en un bar un día después en que supuestamente desaparece, lo vieron en Neuquén, pero según la querella y según el fiscal, toda esa gente miente, están de acuerdo con la policía, hacen una historia bastante importante, dicen que todos mienten, que son falsos testimonios, y la verdad la tiene una persona, que todos conocemos porque es de la localidad, una persona con muchos antecedentes, que es un expaciente de salud mental, y que es el testigo principal que tiene la causa; el juez decide creer lo que dice esa persona”. Indicó seguidamente que ese testigo actualmente “cobra un sueldo mínimo vital y móvil por haber declarado”.
Indicó que ellos quieren saber también “qué pasó con Solano y si hay algún culpable que pague, pero que no paguen justos por pecadores como dijo el Gobernador”.
Concluyó diciendo que los policías procesados y detenidos son “perejiles puestos adentro para que la sociedad se tranquilice”. (APP)
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