Dolor por la muerte de “Cholila”, en el hogar Emaús

Una voluntaria del hogar, escribió una conmovedora carta sobre “Cholila”, un hombre en situación de calle que falleció el pasado sábado, en el Hogar Emaús. Recuerda su historia de vida y destaca la labor de los trabajadores y voluntarios de Emaús, que evitan que los sin techo “mueran solos, en la calle”, expresó.

Murió “Cholila” en el Hogar Emaús. Así lo informó a ANB Paula Grinberg, una de las voluntarias del espacio que alberga a personas en situación de calle, quien envió una carta en la que describe la vida de “Cholila”, sus aspiraciones, sueños, y anhelos. En su relato, se refleja del grado de contención que recibió antes de morir en el hogar Emaús, el pasado sábado.

A continuación la carta de Paula Grinberg se transcribe textual:

El Sábado falleció Cholila, no a muchos le importó...

El martes hablamos un rato, estaba con que se quería internar para ver si podía recuperar a su señora... como se había puesto medio melanco, Néstor (el sereno) lo había mandado a bañar... cuando salió me dijo: “me falta perfume y listo”.. a lo que le contesté: "Yo tengo Cholila, pero es de mina"; “No importa dale..” (le puse), “Ahora sí! estoy ... cómo me gusta el perfume de mujer!!!”, dijo.

Me fui a servir la comida y no volvimos a hablar, al menos lo dejé perfumado.

Qué triste ¿no? todavía se me caen las lágrimas cuando pienso en él... siempre estaba con su estado de "semi embriagues", lloraba por las cosas que no podía hacer, por su nieta, su hija y su mujer... pero lo bueno es que él lloraba y encontraba consuelo, lloraba hasta que nos reíamos y decía "con todo respeto señora, no tiene una monedita que me dé", y volvíamos a reír, estaba contenido...

Cuando el sábado empezó a vomitar sangre los voluntarios de ese día llamaron a la ambulancia, como le dijeron que no había ninguna disponible llamaron a los bomberos... y de ahí ellos mismos (los voluntarios) lo subieron en el coche y lo llevaron al hospital, él estaba consciente, iban charlando en el auto diciendo que no se llevaba la campera porque volvía enseguida. Cuando llegaron lo internaron en estado grave, tenía una hemorragia interna.

Cholila era uno de los sin techo, dormía y comía en "la casita". Hoy me pregunto qué hubiese sido de él si no existiera Emaús Bariloche. Hubiese muerto solo, en la calle, quién le habría avisado a su familia y ayudado con el certificado de defunción.

Que labor importante que hacemos... cuánto orgullo me da formar parte. Cómo me gustaría que la gente se entere de esta labor tan increíble, de voluntarios y empleados que dejan noche tras noche a sus familias para contener a los muchachos... para no dejarlos solos en la calle, a la deriva...

Fuente ANB

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