En los últimos 150 años de historia, las mujeres de todo el mundo comenzaron a tomar conciencia del valor de su participación en la realidad política, económica, productiva, científica y cultural de las sociedades.
Al repasar parte de la historia, vemos que nos encontramos con un camino muy importante recorrido para equilibrar la desigualdad entre las condiciones de vida de los hombres y las mujeres, pero todavía existen fuertes diferencias. Esto nos desafía a replantearnos por dónde seguir para profundizar la igualdad y el equilibrio social.
Nuestra experiencia como mujeres, nos indica que la historia no es una línea recta. Si tenemos que relacionar la vida con una forma, vemos círculos que crean una totalidad en la que cada parte es importante. Lo mismo ocurre cuando miramos la naturaleza que nos rodea, los animales que cuidamos, el aire que respiramos y el agua de nuestros arroyos, lagunas y subsuelo.
La circularidad de la vida nos conecta con un mundo en el que todos los elementos están relacionados y se necesitan mutuamente. Esta idea nos lleva a las concepciones antiguas sobre la tierra: la Madre Tierra, la Pacha Mama, la Ñuke Mapu.
Los ciclos anuales de la naturaleza se representan de manera circular. Invierno, primavera, verano y otoño, cada fase es un momento necesario para que exista la vida: en el círculo se reproduce la continuidad y el vientre que cobija y protege las semillas.
Las ideas de ecología, cooperación, comunicación, solidaridad, comunidad, circulación y sistema, están vinculadas a esa raíz de pensamiento. Todos estos conceptos se grafican con un ida y vuelta, con círculos y lazos de interdependencia. Pero estos lazos no son solamente sociales. Existen también con otros seres vivos y con el entorno natural.
La mayoría de los seres vivos de nuestro planeta necesitamos de los mismos elementos para subsistir, crecer y desarrollarnos: el sol, la tierra, el oxígeno, el agua. Sin embargo, estos elementos no nos aportan lo que necesitamos si no están en equilibrio.
Las mujeres cumplimos tareas de gran importancia, no siempre reconocidas, en lo que tiene que ver con el cuidado del medio ambiente y el desarrollo de las familias y las comunidades. La gran experiencia que tenemos, y que se ha transmitido de generación en generación, principalmente entre mujeres rurales y de los pueblos originarios, nos convierte en fuente de conocimientos sobre la naturaleza.
A pesar de esto, aún hoy muchas mujeres se enfrentan a fuertes barreras por su condición de origen. Por lo general, las jornadas de trabajo de las mujeres son más largas y tienen que intercalar actividades productivas en el campo u otros trabajos con tareas domésticas como limpiar, cocinar, hacer compras, cuidar a los niños y la familia, buscar y obtener agua.
El desarrollo industrial, la contaminación ambiental y el acceso al agua sana, afectan de diferente forma a las mujeres dependiendo de las condiciones de marginalidad, analfabetismo o pobreza.
En este marco, la mejora de la calidad de vida de las mujeres, y de la población en general, no es posible si no existe una mayor equidad y justicia social que garanticen un desarrollo sostenible y la conservación del medio ambiente para las futuras generaciones.
En lo que respecta a nuestra tarea específica como Defensoría del Pueblo, observamos alrededor de la provincia la disparidad que persiste, en términos económicos, entre hombres y mujeres. En el último período, hemos registrado en reiteradas oportunidades consultas y reclamos por situaciones de maltrato laboral, de acoso escolar, de violencia de género, de violencia familiar, de abusos en sus formas más variadas; cuestiones que testimonian la vulnerabilidad a la que están expuestas cientos de mujeres rionegrinas.
En los últimos 20 años, las mujeres han ejercido su influencia en las problemáticas que las atraviesan: violencia de género y trato desigual con respecto al hombre. Hemos alcanzado grandes logros, todo ello reflejado en aportes muy importantes para toda la sociedad aunque esto no sea siempre reconocido.
Hoy queremos alentarlas para seguir sumándonos y uniendo esfuerzos que nos permitan avanzar hacia una sociedad más integrada y justa.
Dra. Nadina Díaz
Defensora del Pueblo de Río Negro
-------------------------ESCRIBANOS, OPINE, ENVÍE INFORMACIÓN-----------------
Forms generator powered by 123ContactForm.com | Report abuse
ESCRIBANOS
0 Comentarios
Déjenos Su Comentario aquí | NoticiasDelBolsón
Emoji