Mendioroz exhortó a dejar de lado la intolerancia y, en cambio, transitar por un camino de diálogo democrático para superar las dificultades planteadas.
Nada se conseguirá con el miedo ni con expresiones injuriantes, solo con el análisis medido y las acciones reflexivas se podrán alcanzar mejores resultados. La vida en democracia implica respeto y tolerancia por el que piensa distinto, pero fundamentalmente el respeto por las instituciones y sus representantes elegidos por el pueblo.
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