“Me rompí emocionalmente”: la historia de Diego Alonso tras el incendio en la Comarca Andina




El reconocido actor y conductor perdió su hogar en El Bolsón luego del feroz incendio que arrasó con 4000 hectáreas. Desde la angustia de la pérdida hasta la campaña solidaria que lideró, comparte cómo se enfrenta al desafío de empezar de nuevo.

El incendio que afectó a la zona de Confluencia dejó más que árboles quemados y hectáreas devastadas. También marcó a fuego la vida de personas que, como Diego Alonso, encontraron en la Patagonia un lugar para echar raíces. “Me rompió emocionalmente”, dice el actor que alterna su vida entre La Matanza y El Bolsón, y que tras dos décadas construyendo un hogar entre los cerros y el bosque, vio cómo el fuego lo redujo todo a cenizas.

Un lazo ancestral con la tierra.

Alonso, conocido por su trayectoria en televisión y radio, pero también por su compromiso social, no es un turista más en la región. "Soy de El Bolsón y soy de La Matanza. El Bolsón lo tengo por una cuestión ancestral: mi mamá es tehuelche, son de esta zona. Así que tengo que venir y hacer pata ancha... porque además soy patón como Patoruzú", cuenta entre risas que ocultan una profunda conexión con la tierra que lo vio renacer como persona.

“Todos los años espero el fuego”

Como muchos habitantes de la Comarca Andina, Diego había naturalizado la amenaza del fuego. "Todos los veranos alguien me pregunta si el incendio llegó a mi casa. Siempre decía que no... hasta que este año llegó. Ahí entendí que me había acostumbrado a vivir con eso. Como quien vive en La Matanza y sabe que alguna vez le van a robar: uno lo naturaliza, pero el día que te pasa, te parte".

El incendio lo sorprendió mientras estaba en Buenos Aires, a días de relanzar su programa de streaming Malos Conocidos . Un mensaje de un amigo desde Mendoza lo alertó. Luego, una de las inquilinas que vivía en su chacra lo llamó para avisarle que estaban evacuando: “El fuego subía por una loma donde tenía un arroyo... llegaba a mi casa”.


¿Se puede reconstruir?
El entramado Social es lo que más dañado está, asegura Alonso y explicó, “no está dañado por el fuego, está dañado por la cantidad de mentiras que venimos viendo a lo largo de los años vuelvo a repetir 20 años después de aquella denuncia aquella primera denuncia Lewis estamos a 20 años después tengo que venir a hacer la colecta para comprar el camión de bomberos 20 años amigo pasaron y seguía faltando lo mismo, sigue faltando la misma herramienta que faltaba hace 20 años que iba a donar Lewis y no la donó, te voy a hacer una campaña yo, acabo de perder  mi historia acá, perder el lugar y hacer la campaña para que después encima te den vuelta la cara”.


Del dolor a la acción: la colecta millonaria

Alonso no se quedó inmóvil. Transformó su angustia en una cruzada solidaria para equipar al cuartel de bomberos de El Bolsón, “qué es lo que está pasando, por qué no se apaga el fuego, entonces me comunican con la gente de acá de bomberos que es lo que pasa me dicen <falta un camión así, así>, me dan las características, averiguo el valor del camión y salgo a hacer una colecta a nivel nacional. Hago una colecta a nivel nacional porque soy una persona que tiene llegada a todo el país. Entonces vamos a hacer esto, hago la colecta, y digo para, yo no quería que me dieran guita a mí, entonces pongo la cuenta de los bomberos, me pongo de acuerdo con la gente de acá para hacer la colecta y empezamos o sea empezamos a disparar eso hacemos la colecta todo avanza, avanza en un momento yo veía que el fuego seguía y digo che no sé qué Cuánta guita estamos juntando, qué guita se juntó acá, empiezo a hablar con la gente del cuartel y aparte yo le mandaba empresas o gente que quería hacer donaciones grandes, se los pasaba a ellos directamente yo Imagínate que desde el 28 de enero hasta finales de febrero yo me dediqué solo a eso, perdí un laburo como guionista, pero acá perdí recuerdos, perdí mi casa, perdí el sueño de mi vida yo me había armado un lugar ahí para cuando envejezca, para quedarme sentado ahí laburando tranquilo, era el lugar que yo le había elegido para para el ocaso y lo perdí”.

A pesar del esfuerzo y la visibilidad que ganó la campaña, Diego cuenta que nunca recibió ni siquiera un mensaje de agradecimiento del cuartel. "Mi casa no la intentaron apagar. El tanque australiano estaba lleno. Nadie llegó. Me sentí abandonado".




El peso de la historia.

Diego no solo perdió su hogar: perdió el sueño que venía construyendo hace 20 años. "Acá lloré a mis hijos, les enseñé a cuidar el bosque. Me armé un lugar para cuando envejezca. Perdí eso. Y tuve que salir a hacer la colecta para comprar el camión que Lewis prometió hace 20 años y nunca donó".

La presencia del estado.

A pesar de todo, reconoce el accionar del Estado: "Respondieron en tiempo y forma, el estado se hizo responsable, respondieron la verdad que yo lo tengo que felicitar. Pero los bomberos se borraron, ni un mensaje recibí <Che loco como estas>. Yo estuve desde el 28 de enero hasta fines de febrero dedicado solo a esto. Perdí un laburo como guionista, pero también perdí mi historia".

¿Cómo se sigue después del fuego?

Hoy, el actor sube todos los días al Mallín Ahogado. Intenta reconstruirse, al menos desde el pensamiento. "Se me ocurren cosas distintas: algunas buenas, otras horribles. Porque para donde mires hay recuerdos quemados. Pero también está la posibilidad".

Y, fiel a su estilo, no se calla: "Estas cosas siempre le pasan a la gente de a pie. A los políticos no se les inunda la casa, no se les quema. A nosotros sí. Pero yo voy a seguir molestando, diciendo lo que pasa. No me importa a quién le moleste. Vivo en La Matanza, no le tengo miedo a nadie".



Publicar un comentario

0 Comentarios