La familia denuncia maniobras y demoras en el proceso que impiden llegar a juicio. A más de cuatro años del crimen, los allegados reclaman justicia y advierten sobre el riesgo de que la causa prescriba.
En la provincia de Chubut, la búsqueda de justicia por el asesinato de Alejandro Tino Jhon ocurrido hace más de cuatro años en un procedimiento policial, vuelve a enfrentar un nuevo obstáculo. Lo que debería ser un acto de reparación y verdad se transforma, según la familia, en un calvario judicial marcado por dilaciones, recusaciones y cambios inesperados en la causa.
La última novedad llegó de manera abrupta: cuando ya estaba prevista la selección de jurados en Esquel y el juicio parecía próximo a comenzar, el juez a cargo, se apartó de la causa. Este hecho obliga a reiniciar el proceso, designar un nuevo magistrado y reprogramar fechas, lo que significa más demoras y un nuevo golpe a los familiares de la víctima.
"Nos vienen tomando el pelo"
Donato Jhon, hijo de Tino, expresó su indignación:
“Ya estábamos listos para que se sortearan los jurados, cuando a minutos de iniciar presentaron una carta diciendo que el juez se apartaba. Ahora hay que empezar de nuevo. Nos vienen tomando el pelo hace cuatro años”, relató.
La familia no oculta su preocupación por los plazos. Según explicó Donato, existe la posibilidad de que, si no se llega al juicio antes del 15 de noviembre, la causa quede sin efecto por vencimiento de los tiempos procesales:
“Si eso ocurre, aunque sean culpables, no va a pasar nada. Y si son inocentes, tampoco tendrán la oportunidad de demostrarlo. Es un sinsentido que afecta a todos”.
Un “manual del asesinato perfecto”
La situación genera un fuerte malestar en la comunidad, que percibe un patrón de trabas y demoras. Donato lo sintetizó con crudeza: “Parece que la justicia de Chubut estuviera escribiendo el manual del asesinato perfecto. Porque con tantas vueltas, al final nadie paga por lo que pasó”.
El reclamo no se limita al dolor de una familia. Para los allegados de Alejandro, lo que está en juego es mucho más amplio: “No es solo una falta de respeto a mi padre. Es una falta de respeto a todos los vecinos. Hoy le pasó a él, pero mañana le puede pasar a cualquiera. La justicia que debería darnos seguridad terminó siendo injusticia”.
Entre la bronca y el cansancio : A pesar de la angustia, Donato reconoce que no todos los integrantes de la fuerza policial deben cargar con esta responsabilidad: “Yo tengo amigos policías. Como en todos lados, hay gente buena y gente que se equivoca. Pero en este caso hicieron las cosas mal y alguien tiene que hacerse cargo”.
Mientras tanto, la familia busca sostener el reclamo en los medios y presionar a la justicia para que avance el juicio oral. El tiempo, sin embargo, corre en contra.
Una comunidad que acompaña
Vecinos y allegados siguen de cerca la causa, acompañando a la familia en cada paso. No obstante, el clima de frustración se impone: cada suspensión, cada maniobra judicial, se siente como un nuevo golpe.
El caso de Tino Jonh expone, una vez más, las profundas dificultades del sistema judicial chubutense para garantizar respuestas rápidas y efectivas en hechos graves que involucran a fuerzas de seguridad.
0 Comentarios
Déjenos Su Comentario aquí | NoticiasDelBolsón
Emoji