El Gobierno Nacional anunció una modificación en la
metodología de implementación del subsidio, y la garrafa que hoy se consigue a
35 pesos podría pasar a costar más de 100. Hay faltantes y ya los vecinos que
utilizan ese servicio demuestran su enojo. El aporte lo recibirían ahora de
manera directa los hogares más pobres.
"Un invierno complicado. Los vecinos vamos a tener
problemas y no vamos a quedarnos en casa". En esos términos, un vecino del
oeste de la ciudad advirtió que el inminente aumento en el precio de las
garrafas podría generar protestas y reclamos. Es que el cambio en el sistema de
subsidio aplicado por el Gobierno nacional a ese producto -que tendrá vigencia
desde el 1 de abril- podría disparar el precio de los tuvos de 10 kilos de los
35 pesos actuales a "más de 100".
En realidad, la Nación anunció la implementación del
programa Hogar, que subsidiará de forma directa a los usuarios de garrafas.
Está previsto que llegue a unos 2,5 millones de familias de bajos recursos, en
todo el país.
Los subsidios -según el detalle brindado por el ministro de
Economía de la Nación, Axel Kicillof- abarcarán a unas 40 millones de garrafas.
"En lugar de subsidiar la oferta como hasta ahora, lo que provocó algunas
distorsiones, ahora vamos a depositar directamente los fondos en las cuentas de
los beneficiarios", explicó el ministro.
El mecanismo será el depósito en cuenta de los beneficiario
del monto del subsidio, que se estimó en un total de 3.000 millones de pesos al
año. Se realizará el depóstio de la diferencia del precio máximo de mercado de
la garrafa y el valor neto que venía pagando el usuario alcanzado por
el plan.
El vecino o familia que no tenga cuenta bancaria, deberá
inscribirse en la filial de la Anses de su localidad. De acuerdo al cálculo
realizado por Nación, se destinará un un cupo de 16 garrafas al año para
familias de hasta cinco miembros; 20 para los hogares numerosos, y de hasta 25
garrafas en los que habitan en la región patagónica.
Esa medida tuvo ya una primera repercusión. Desde el jueves
pasado es muy complicado poder comprar garrafas. Si bien la distribución
corresponde a la Cooperativa de El Bolsón, Coopetel, la venta en Bariloche está
a cargo de distintos comercios. En dos de ellos -ubicados en el Alto de la
ciudad- este lunes no se vendieron las garrafas, y se indicó a ANB que el
camión desde El Bolsón no llegaría hasta el miércoles -es decir el 1 de abril-,
cuando habitualmente arriba los martes.
Fuentes de Coopetel confiaron a este medio que el tubo de 10
kilos podría costar más de 100 pesos, lo cual implicaría un aumento del 300 por
ciento en relación al valor con el subsidio directo que se aplicaba hasta
ahora. (ANB)
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