Leo Vaca: “Me parece que ahí está el asunto, en poder expresarse a través de la imagen y poder liberar algún fantasma interno”

En una entrevista exclusiva para la XV edición del “Mes de la Fotografía en Bariloche”, el notable fotógrafo del diario Clarín, Leo Vaca, detalló lo enseñado en el taller denominado “Análisis de la Mirada”. Durante tres días intensivos, compartió sus conocimientos con jóvenes y adultos aficionados a la fotografía,  “donde el que más aprendió fui yo”, expresó. De manera sencilla, respondió a cada una de las preguntas y habló acerca de “la mirada” del fotógrafo, sobre lo que trasciende a las técnicas y tecnologías.

También explicó que su profesión le sirve de terapia para “poder liberar algún fantasma interno”. Por otro lado, destacó el trabajo de los organizadores del evento e hizo una especial pausa a la hora de hablar del periodismo, la noticia y la imagen.

¿En qué consistió el taller “Análisis de la Mirada”?

“Consiste en un encuentro de tres días muy intensivo, donde mi intención es poder orientar a los jóvenes talentos en sus búsquedas expresivas, sinceras, originales y –básicamente- autoreferenciales. Hace dos años lo hicimos y fue una experiencia maravillosa, donde el que más aprendió fui yo y ahora estamos repitiendo la experiencia”.

¿Cómo se aplica “la mirada” como fotógrafo para transmitir la realidad?

“El análisis es bastante simple. Una obra conmueve o no. Las búsquedas son bastantes particulares y siempre muy subjetivas y la persona que hace esa fotografía tiene un por qué, pero si ese por qué queda ahí, y si al observador no le pasa nada, no conmueve, no genera una sensación nueva, para mí no tiene mucho sentido. Estamos trabajando en el análisis de estos trabajos para ver cuándo se genera alguna grieta de sensibilidad y de expresión más pura”.

¿Se transmiten “los rollos” de la persona que toma la imagen?

“Si se logra transmitir es un éxito, es justamente es lo que estamos tratando de hacer sobresalir. Me parece que ahí está el asunto, en poder expresarse a través de la imagen y poder liberar algún fantasma interno”.

¿Sirve de terapia?

“Sí, para mí sí. Justamente como el arte mismo, se puede expresar, generar una obra desde uno y, a partir de ahí, si la obra trasciende es la razón de todo. Si la obra no trasciende y –simplemente- te sirve a vos para canalizar alguna traba o alguna experiencia, algo de tu subconsciente, de tus sueños, en tus sensaciones, también es válido. Me parece que es válido el intentarlo, el presentarlo y trabajar para eso. Después si termina siendo un fotógrafo famoso o no, no importa, ¿no?”.   

¿Qué técnicas se utilizan en la actualidad a la hora de fotografiar? ¿Qué es lo que sirve y qué no?

“Yo creo que la tecnología hace avanzar todo muy rápido, pero la esencia está en una imagen definida, es decir, definida no por definición sino por lo que se termina mostrando. Si la imagen es definitiva, está impresa en un papel arrugado y de mala calidad, pero es contundente, bienvenida hecha con un teléfono o hecha con una caja de cartón  con un papel fotográfico o hecha con una cámara súper digital X422 around. A mí me parece que el artista trasciende la tecnología que utiliza como herramienta”.

¿Qué significa para usted el Mes de la Fotografía?

“Me parece que es un evento muy valioso que nutre a la comunidad de Bariloche y localidades vecinas de una oportunidad única de poder ver muestras traídas de otros lugares, muestras locales, donde se genera un movimiento y una atención hacia la fotografía que siempre redunda en hechos positivos. Se remueve el hormiguero, por decirlo de alguna manera y eso siempre es muy positivo. También me parece muy valorable el trabajo de los organizadores que siempre los hacen a todo pulmón y en la medida en la que uno pueda colaborar, con todo gusto”.

Cuando saca una fotografía sobre un hecho puntual y describe una noticia, ¿cómo la elabora?

“El hecho de llamarse a uno mismo reportero gráfico o fotógrafo, a veces, queda corto, porque en realidad somos periodistas de la imagen. Tenemos suficiente capacidad como para informar con nuestros conocimientos con la mirada y con nuestras herramientas. Ese proceso también está intervenido por otras personas que son los que deciden qué foto va a salir y cuál no. También les pasa a los periodistas muchas veces escriben sus textos y después viene alguien y les cambia el título. Borran un párrafo y cambia todo el discurso y desde sus casas, al día siguiente, están enojados porque no era lo que ellos querían decir. Bueno, con la imagen pasa lo mismo, creo que es un problema del periodismo que siempre pasa que terminamos respondiendo a líneas editoriales de los patrones. Creo que con la fotografía tenemos más posibilidades de filtrar todo eso. Creo que en el periodismo se miente mucho y creo que con las imágenes es el lugar donde más se filtran las verdades”.