El Juzgado Federal de Esquel, a cargo de Guido Otranto,
dispuso el procesamiento de dos imputados por el delito de trata de personas
bajo la modalidad de captación, traslado, y acogimiento con fines de
explotación laboral.El delito se consideró agravado porque una de las víctimas es menor de edad, y fue cometido abusando de sus situaciones de vulnerabilidad, y porque se logró consumar la explotación de las dos víctimas reduciéndolas a condición de “servidumbre”.
La causa se inició el 21 de julio pasado, cuando una de las víctimas denunció en la Comisaría de Corcovado la situación en la que se encontraba. Esa misma noche se realizaron allanamientos en dos tiendas de ropa, una en esa localidad y la otra en Trevelin, en las que se explotaba laboralmente a las víctimas.
Detalles
Se comprobó que las dos víctimas prestaban servicios laborales sin percibir remuneración, y fueron alojadas en condiciones paupérrimas en el mismo lugar donde trabajaban.
Estaban desarraigadas y lejos de sus familiares, una tenía 19 y la otra era menor de edad –tendría 14 años-; tenían bajo nivel sociocultural y carecían de recursos económicos para manejarse autónomamente, por lo cual quedaron sujetas al dominio de los imputados que las trajeron a este país.
De Bolivia a la cordillera
El juez Otranto señaló que los dos procesados viajaron en mayo de este año con las dos víctimas desde Bolivia. En Oruro contactaron a la víctima de 19 años y le ofrecieron trabajar en una tienda de ropa. Los padres de la víctima habrían dado permiso para que viniera a trabajar.
Se habría pactado que cuando finalizara el período de trabajo, que en principio sería de tres meses y podría extenderse a un año, la víctima regresaría a Bolivia y se abonarían –frente a los padres- 250 dólares por mes trabajado.
Mientras tanto la víctima recibiría alimentación y alojamiento en la misma tienda en la que trabajaba, y se le permitía utilizar dinero del comercio para gastos de subsistencia.
Cuando se realizó el allanamiento, se advirtió que dormía sobre cartones en una cama sin colchón.
La víctima menor de edad sería su prima, pero vino al país con un documento de identidad de una hermana de la otra víctima, porque –aparentemente- estaría indocumentada en Bolivia.
En un principio las dos fueron alojadas en la tienda de Corcovado y quedaron solas a cargo del comercio. Días antes de la denuncia, la imputada dispuso que la víctima menor fuera a la ciudad de Trevelin, donde permaneció viviendo y trabajando en la otra tienda de ropa que tenían los imputados.
Los documentos de las dos víctimas estaban en poder de los procesados. Desde el momento que fueron separadas no tuvieron contacto entre ellas ni noticias una de la otra.
La víctima de 19 años, quería dejar la tienda y viajar a Buenos Aires donde tiene familiares. Los imputados, siguiendo indicaciones de los padres de la víctima, le negaron el permiso.
Situación de las víctimas
La víctima de 19 años fue asistida por la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, y la Oficina de Tráfico y Trata de Personas de la Subsecretaría de Desarrollo Humano y Familia de la Provincia del Chubut. Actualmente se encuentra viviendo junto familiares que residen en la provincia de Buenos Aires.
La víctima menor de edad –informó el Juzgado Federal de Esquel- quedó a cargo del Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito (SAVD) de la Oficina Fiscal Esquel del Ministerio Público Fiscal de nuestra provincia, y la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia de Esquel.
Sus padres vivirían en una zona rural próxima a Oruro y actualmente estaría en proceso de retomar vínculo con un hermano que reside en Jujuy.
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