Preocupación por la continuidad de La Trochita

Trabajadores alertaron que no tienen combustible ni repuestos. Esperan definiciones de una reunión en Esquel con autoridades y empresarios.


“Hoy no tenemos combustible, ni bronce para fabricar los repuestos. Estamos en una situación muy precaria. Tenemos el apoyo de toda la cordillera, pero ahora necesitamos definiciones políticas”, graficó ayer el maquinista Alfredo “Palito” Mansilla sobre la situación del ramal ferroviario que une Ingeniero Jacobacci con Esquel y que tiene en El Maitén sus talleres principales.

Por estos días, nuevamente se alzaron las voces de alerta sobre la continuidad del Viejo Expreso Patagónico como recurso turístico y la estabilidad laboral de unos 80 empleados (distribuidos entre El Maitén y Esquel).

La administración está a cargo de Corfo Chubut -al igual que el centro de actividades de montaña La Hoya-, y este lunes a las 11, habrá una reunión en Esquel para analizar la situación y pedir la descentralización. Al respecto, han comprometido su participación los intendentes Sergio Ongarato (anfitrión), Oscar Currilén (El Maitén), concejales de distintas localidades, trabajadores del ramal y cámaras empresariales.

A su turno, el referente regional de la Cámara Argentina de Turismo (filial Chubut), Antonio Guzmán, reclamó además “reflotar el acuerdo de 2012 (firmado por los gobernadores Alberto Wereltineck y Martín Buzzi), con la premisa de reabrir el tramo El Maitén/Jacobacci (402 km), e incluso hacer los charters contratados por turistas extranjeros pasando por Ñorquinco, el túnel y el puente -único en el mundo- sobre el río Chico”, al tiempo que recordó “el corte de las vías por un conflicto mapuche” a la altura de Leleque.

A su criterio, “la cordillera ha quedado relegada en cuanto a inversiones turísticas. Se han firmado acuerdos millonarios de conectividad para la costa chubutense, pero acá seguimos olvidados. No hay turismo sin infraestructura, pretendemos que el ministerio tenga contacto con los prestadores y que nos escuchen. Tenemos propuestas para que reflorezca la actividad, que hoy está planchada. El Maitén es un pueblo absolutamente ferroviario y toda su gente está unida en mantener viva a La Trochita, que es su alma y su corazón”.

Desde su visión, el ramal “no se puede seguir manejando desde Corfo, porque el resultado -a través de todos estos años- está a la vista, hay que descentralizar y tener acá una coordinación y una gerencia del producto, como fue históricamente”, insistió.

“Para que funcione todo el año, es un recurso conocido internacionalmente y debiera salir a venderse a través de las embajadas”, propuso.












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