La realidad acuciante y la crisis en la que está inmersa toda la república Argentina golpea a los que menos tienen incluso a los merenderos y comedores comunitarios, en El Bolsón había cerca de 14 merenderos reconocidos hoy cerró el cuarto comedor quedan tan sólo 10, esto nos explicaba el pastor Jaime Soto, " nosotros estábamos funcionando hasta la semana pasada aquí en el barrio Esperanza y bueno nos encontramos con una diferencia al año pasado si bien es cierto el año pasado pudimos resolver los asuntos a través de la hermandad de la iglesia y de ayudas de alguna forma de supermercados y algunos otros pero este año vimos que la diferencia arranca prácticamente desde la economía ya que nos dimos cuenta que el gas se fue mucho más arriba que el año pasado, por decirlo de alguna forma nosotros llegamos a verlo hasta tres veces más y eso no nos da para una comunidad de una iglesia que es pequeña”, con todo el pastor agrego: “nosotros no somos más de 30 o 40 miembros y en tiempos difíciles donde la gente también aporta poco", remarcó el pastor quién hizo hincapié en esta situación económica.
Mucho chanta pidiendo colaboración.
Más adelante Soto remarcó que también es una situación compleja toda vez que van a pedir colaboración a los grandes comercios y de entrada te dicen no colaboró porque hay mucho chanta pidiendo ayuda, "yo soy el pastor y puedo ayudarlos, apoyarlos, ir a tocar las puertas la experiencia la puedo levantar yo pero al encontrar un mercado que te digan de una, mira son tantos los sin vergüenza que vienen a pedir, que ya estamos cansados, eso nos llega".
La ayuda estatal
Seguidamente y en relación a la ayuda que reciben desde Desarrollo Social municipal Soto agregó, " ellos fueron correctos en decirme lo que habían planeado, lo cierto es que ellos, creo que recibieron órdenes y yo no sé si desde lo alto jefe, que tienen que tener un listado de nombres y me parece justo es un ordenamiento para presentarse y esa fue la oportunidad que me dieron a mí que me pareció que estaba bien en un principio pero después me encontré con la otra realidad --Cuando uno lleva un plato de comida a una casa la realidad es otra, no es la misma, no le puedes preguntar el nombre apellido y te voy a poner un listado, es una acción que nace del corazón”. Los envidiosos “después se encuentra uno con que viene el otro, que es el típico envidioso o celoso, y te dice si este está en el comedor fulano de tal-- Entonces yo adivinó no soy y eso también trae problemas", sentenció el pastor que con desazón confirmó que desde esta semana cierra el merendero comunitario.
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