Prisión perpetua para Alves Ferreira, el asesino de Eduarda Santos



El juez Juan Martín Arroyo rechazó los planteos del defensor oficial Nelson Vigueras e impuso una condena de prisión perpetua para Fernando Alves Ferreira, quien se autopercibe como Amanda, luego de que un jurado popular lo declare responsable del homicidio agravado por su comisión con arma de fuego y alevosía, además del delito de tenencia de arma de fuego.

Al hacerlo, el magistrado no hizo lugar al planteo defensivo que pretendía la declaración de inconstitucionalidad de la pena de prisión perpetua para el caso concreto, procurando así reducir el monto de pena para Fernando Alves Ferreira.

Los delitos por los que el jurado popular declaró culpable a Alves Ferreira, son sancionados únicamente con pena de prisión perpetua, por ello el defensor intentó la declaración de inconstitucionalidad al entender que implicaría imponer una pena cruel, inhumana y degradante, por lo que solicitó contemplar la escala penal para el delito de homicidio simple, es decir de 8 a 25 años de prisión.

Según el argumento defensivo, Alves Ferreira recién podría solicitar la libertad condicional a los 64 años, lo que a su criterio impedía verificar que el objetivo de la pena privativa de libertad, es la resocialización de los condenados. No obstante, pidió que expresamente se establezca la fecha en la que podrá acceder  la libertad condicional. 

La defensa, pidió especialmente que el juez Juan Martín Arroyo, tenga en cuenta para la resolución, los informes de psiquiatría forense agregados al legajo, en los que se describe que Alves Ferreira padecía al momento de los hechos,  un estado marcado por las ideas paranoides.

El fiscal Martín Lozada rechazó de plano el pedido y remarcó que la única pena posible para el acusado es la de prisión perpetua, lo que finalmente así fue resuelto por el magistrado.

Alves Ferreira fue juzgado y condenado por un hecho ocurrido el 16 de febrero del año pasado en uno de los senderos que conducen al lago Escondido, ubicado en pleno Circuito Chico, uno de los recorridos turísticos más transitados de la región.

Alves Ferreira trasladó a la víctima en su automóvil y tras arribar al lugar la ejecutó mediante varios disparos de arma de fuego. Luego todas las pruebas llevarían a él. Horas después de ser detenido, en audiencia de formulación de cargos admitió los hechos pese al consejo contrario de sus abogados defensores que le reclamaban que mantenga el silencio. Tras finalizar su confesión dijo "¿Ya está, me van a dar perpetua?"


El Cordillerano. 


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